Me molesta que la gente banalice sobre según que temas. La cultura rasta es víctima habitual del estereotipo y la broma fácil. A veces se trata de la clásica ignorancia inseparable del pensamiento retrógrado. Otras veces es simple desconocimiento (ignorancia sin maldad) de lo que hablamos. Os voy a contar cuatro datos de “La cultura rasta” sin ponerme serio del todo. ¿Por qué? Mi pelo largo y rizado y el color negro de mi piel me obligan a ello. Fuera bromas, sí es cierto que mi corazón late a ritmo de reggae. Además, hoy es el cumple de Bob (70) y es una buena forma de rendirle mi tributo personal. Vamos allá.
Primera parte : ¿Qué significa la palabra “rastafari”?
El rastafarismo es una religión. Es una versión africana del cristianismo que se desarrolla principalmente en Jamaica en los años 30. Básicamente se basa en que los jamaicanos se identificaron como descendientes de los etíopes y renegaron de su dominación británica. De ahí los dos emblemas rastas: los colores de su bandera son el rojo-amarillo-verde (bandera de Etiopía y no de Jamaica) y el león que porta un estandarte con una cruz en el mástil (el león conquistador de Judah, con la cruz que lo vincula con la iglesia ortodoxa etíope). Según esta religión, Jesucristo tenía que volver a la vida reencarnado (casualmente) en Haile Selassie I ( Rey número 225 de la estirpe del Rey David). Tafari Makonnen era príncipe (“Ras”) antes de convertirse en Rey de Etiopía y reinar con el nombre de Haile Selassie I. De ahí viene el nombre de Ras-tafari (príncipe Tafari Makonen). Por cierto, no era el primero en la línea de sucesión, pero sus hermanos tuvieron oportunos accidentes fatales. Lo cierto es que para los jamaicanos pobres saberse emparentados con la tribu de Judah, descendiente de la Reina de Saba, era una perspectiva más esperanzadora que estar sometidos a los británicos. Parece que, inicialmente, sus pelos rizados (dreadlocks) son un intento de imitación de las imágenes de los guerreros tribales africanos. Posteriormente se instauró como norma que un rastafari no debía nunca cortarse el pelo (aunque estaba dispensado en circunstancias muy concretas). La marihuana (Kaya, Kanja, ganja, herb,…) era para ellos un regalo de Dios (Jah) que les permitía la comunión con él. Esto puede parecer una chorrada, pero, vista desde fuera, cualquier religión está repleta de incoherencias y dogmas sinsentido, que tal vez tuvieron sentido en sus inicios, pero que hoy en día se continúan simplemente por el “principio de la inercia”. Y, desde luego, no faltan fanáticos ansiosos por matar y/o morir por estos dogmas.
Antes de pasar a hablar de la relación de Bob Marley con la política de la Isla, os pongo ‘Concrete jungle’, una de mis favoritas.
Segunda parte: “Cuando los conciertos no son sólo música”
Bob Marley acabó diciendo una frase no tan conocida como otras suyas: “Nunca dejes que un político te haga un favor porque querrá controlarte para siempre”.
La situación política en Jamaica en los 70’s era complicada. Dos candidatos se disputaban el pastel. Por una parte, estaba el conservador Edward Seaga, apoyado por la CIA. Por otra, el socialista Micheal Manley que tenía entre otras ideas, nacionalizar las exportaciones jamaicanas. Independientemente de su ideología, ambos tenían algo en común…eran políticos.
Manley (Primer Ministro en aquel entonces) vió claro que para ganarse a las masas, sin las cuales no podía vencer las elecciones, podía usar el tirón de la música de Bob Marley. Con este fin, promovió un concierto gratuito para todo el pueblo que tendría lugar el 5 de Diciembre de 1976. Se llamaría “Smile Jamaica” (como una canción de Bob). Dicen que Marley no quería que se politizara ese concierto, pero la realidad es que Micheal Manley pretendía usarlo para anunciar la convocatoria de elecciones.
Un mes antes, Bob Marley recibió varias amenazas de muerte para que no participara en él. El 3 de Diciembre, siete pistoleros entraron en los estudios donde ensayaba y dispararon contra él, su mujer Rita y su manager. Una bala le rozó el pecho y otra le impactó en el brazo. A Rita le hirieron leve en la cabeza y su manager se llevó la pero parte, aunque no murió. Dos días después Marley (con el brazo en cabestrillo) and the Wailers (excepto Aston Barret) actuaron ante 85000 personas en el concierto previsto.
Tras esta movida, Marley decidió exiliarse a Londres y durante 18 meses no pisar suelo jamaicano. Durante este período, la situación en Kingston se fue volviendo insostenible, con una guerra no declarada entre ambas facciones políticas. Serán tres pistoleros, que controlan la calle y que trabajan para uno u otro de los políticos, los que (desde la misma cárcel en que están encerrados) propondrán una tregua y un acto de reconciliación entre las partes. La idea será hacer un concierto multitudinario de reggae, con muchos de los artistas jamaicanos más destacados y en el que se escenificará la reconciliación entre ambos políticos.
Para este concierto se le propuso a Marley su regreso del exilio. Son varias las leyendas urbanas alrededor de este concierto. Lo cierto es que, con sus luces y sus sombras, el concierto “One Love Peace” fue uno de los más emblemáticos de Marley. Se le ha llamado el Woodstock del tercer mundo. Actuaron diferentes cantantes emblemáticos del momento.
Pero el clímax del concierto se alcanza durante la actuación de Marley cantando “Jammin”, mientras improvisa, sobre la base rítmica de la canción, estas palabras: “Just let me tell you something (yeah), to make everything come true, we gotta be together. (Yeah, yeah, yeah) and through the spirit of the Most High, His Imperial Majesty Emperor Haile Selassie I we’re inviting a few leading people of the slaves to shake hands. . . To show the people that you love them right, to show the people that you gonna unite, show the people that you’re over bright, show the people that everything is all right. Watch, watch, watch, what you’re doing, because I wanna send a message right out there. I mean, I’m not so good at talking but I hope you understand what I’m trying to say. Well, I’m trying to say, could we have, could we have, up here on stage here the presence of Mr. Michael Manley and Mr. Edward Seaga. I just want to shake hands and show the people that we’re gonna make it right, we’re gonna unite, we’re gonna make it right, we’ve got to unite . The moon is right over my head, and I give my love instead. The moon was right above my head, and I give my love instead.”
Instantes después, con los dos políticos en el escenario, Marley levanta las manos de ambos unidas por una de las suyas mientras extiende delante la otra, en una de las imágenes que quedan congeladas en la memoria de un pueblo.
Os pongo el link de este momento, aguantad tres minutos de mala calidad de video y sonido mientras disfrutáis de Marley en directo ( que si no lo habéis visto nunca es necesario y si lo habéis visto antes, imprescindible ). Tampoco tiene desperdicio la hipocresía de las caras de los dos políticos mientras Marley se vacía en el escenario.
Lo triste de todo esto es que no sirvió para nada. Siguió la violencia, la confrontación y los dos políticos no volvieron a darse la mano hasta el funeral de Marley.
http://youtu.be/xJHD0dYX5pw?list=RDxJHD0dYX5pw
Epílogo: “Música, pero siempre con mensaje”.
No voy a contaros nada de conceptos musicales, principalmente porque no tengo formación musical y ya me odiáis por el tostón que os estoy dando. Pero, básicamente, Marley es conocido mundialmente por cuatro años de su discografía, cuando se lo llevaba currando y mucho, desde veinte años antes. La tópica y típica imagen del rasta emporrado que pasa de todo es un estereotipo que no tiene nada que ver con la realidad musical de Marley. Como artista, Marley se impregna de los ritmos jamaicanos previos y desde ellos crea un estilo propio, que evolucionará a lo largo de los años. Cuentan que mucho antes de la fama, ya hace que los Wailers ensayen una y otra vez buscando la perfección. Es decir, no precisamente están todos los días en el porche de su casa fumando hierba y viendo el atardecer…
El reconocimiento internacional de Marley coincide con la explosión del punk. Punk, ska y reggae están íntimamente relacionados musical e ideológicamente. Se puede ver la influencia del reggae en algunas bandas míticas del punk, como, por ejemplo, The Clash. De hecho, se cuenta que “Police & Thieves” de The Clash inspiró el “Punky Reggae Party”, en la que capta el espíritu londinense de esa época. Marley hace un guiño al punk en una de esas estrofas cuando nombra a varios grupos de punk y reggae,
“I’m saying, The Wailers will be there
The Damned, The Jam, The Clash,
Maytals will be there
Dr. Feelgood too, ooh» (Punky Reggae Party)
Se puede leer mucho sobre su música, pero prefiero contaros cuatro cosas sobre el mensaje. Personalmente lo simplifico en dos vertientes: Positivismo vital (atrévete a vivir) y lucha contra la injusticia ¿Qué mejor forma de verlo que citando alguna frase de sus canciones?
Singin’: «Don’t worry about a thing,
‘Cause every little thing gonna be all right!» (three little birds)
Sun is shining, the weather is sweet
Make you want to move your dancing feet
To the rescue, here i am (sun is shining)
Life is one big road with lots of signs,
So when you riding through the ruts, don’t you complicate your mind:
Flee from hate, mischief and jealousy!
Don’t bury your thoughts; put your vision to reality, yeah!
Wake up and live (wake up and live)
Preacher man, don’t tell me, Heaven is under the earth
I know you don’t know, what life is really worth
It’s not all that glitter is gold, half the story has never been told
And now you see the light,
you stand up for your rightGet up, stand up, stand up for your rights
Get up, stand up, don’t give up the fight (Get up stand up)
Slave driver, the table is turn;
Catch a fire, so you can get burn, now. (Slave driver)
Them belly full, but we hungry;
A hungry mob is a angry mob. (Them belly fully)
«If you are a big tree, we are a small axe sharpened to cut you down» (Small axe)
Y ya para terminar, os dejo una canción, mi preferida. Siempre que hacen un homenaje a Marley acaban poniendo “Redemption Song”, que, por ser la última que compuso, cuando ya sabía que traspasaba, tiene significado y es muy adecuada. Por eso… ni de coña os la pongo. Yo creo que lo que define a una persona no es su acto final (por importante y trascendente que sea). Generalmente, te define lo que haces por el camino. Por eso, para mí, el mensaje reivindicativo de Marley se plasma, como en ninguna otra, en esta canción. Curiosamente, la letra no es suya. Es, palabra por palabra, el discurso que pronuncia Haile Selassie I ante la ONU en 1963 (por segunda vez, el mismo discurso, porque 30 años antes no le habían hecho ni caso). Selassie pudo ser lo que fuera, pero estas palabras son dignas de una canción de Bob Marley. Con todos vosotr@s: War
“Until the philosophy which holds one race superior
And another Inferior is finally
And permanently Discredited And abandoned –
Everywhere is war –
Me say war.
That until there is no longer
First class and second class citizens of any nation
Until the colour of a man’s skin
Is of no more significance than the colour of his eyes –
Me say war.
That until the basic human rights
Are equally guaranteed to all,
Without regard to race –
Dis a war.
That until that day
The dream of lasting peace,
World citizenship
Rule of international morality
Will remain in but a fleeting illusion to be pursued,
But never attained –
Now everywhere is war – war.
(…)
War in the east, War in the west,
War up north, War down south –
War – war –
Rumours of war.
And until that day, The African continent
Will not know peace,
We Africans will fight – we find it necessary –
And we know we shall win
As we are confident
In the victory
Of good over evil”.
Como no quiero parecer tan pesado como soy, lo dejo aquí. Esto nunca ha pretendido ser más de cuatro pinceladas imprecisas y, sin duda, insuficientes. Si de verdad estáis interesados en conocer esta historia, os recomiendo el libro «Positive vibration» de Carlos Monty. (editorial La Máscara).